Opiniones del Sapodilla Ubud 4 estrellas

El personal, el más cercano y amable que hemos encontrado en indonesia. La habitación era enorme, la cama gigante y cómoda. Era muy bonita, nos dejaron muchos amenities de bienvenida. El balcón con vistas a la piscina. Tenía desayuno incluido pero no lo usamos. Si que nos prepararon una cesta de pre desayuno el último día porque nos íbamos muy pronto. La piscina era muy bonita y el ambiente en general del hotel también. Tenían parking para guardar la moto y un servicio de shuttle hacía el centro de ubud si lo necesitabas.

La ubicación perfecta, muy cerca del centro de Ubud, cerca de numerosos restaurantes, spas etc. Dentro del hotel estás como en un oasis, no se oye nada del bullicio de la ciudad. El desayuno estaba muy bueno, mucha variedad y mucha cantidad. La habitación es amplia y bonita. Totalmente recomendable

La habitación olía un poco a humedad. Luego te acostumbras, pero es la única queja que podemos poner.

Habitación muy amplia y limpia. Desayuno a la carta, espectacular. Personal muy amable y atento, siempre dispuestos a ayudar. Un remanso de paz en el ajetreado Ubud.

Limpieza y amabilidad del personal

Un poco alejado del centro de Ubud

Si

Ubicacion perfecta, servicio de 10, es increible.

Lindo lugar, habitaciones cómodas alrededor de la piscina, hotel tranquilo con excelente servicio, desayuno a la carta y servicio de lavandería 24hrs Como nuestro vuelo salía temprano nos hicieron un desayuno para llevar el último día. Personal muy amable

Me encantó, el personal fue muy servicial, siempre prestos a colaborar en todo, muy colaboradores, las instalaciones del hotel impecables, cada día hacían limpieza del cuarto y lo dejaban como nuevo y ofreciendo siempre demás para hacernos sentir como en casa. Esperamos volver pronto a este hotel

La amplitud y limpieza y simpaticos

Está ubicado en una entrada oscura

El hotel es bonito y muy buena opción calidad/precio. Buena ubicación. Servicio de shuttle correcto. El desayuno es variado y está bien. El personal es amable y servicial.

La cama y almohadas eran un poco incomodas.

Todo me gustó la verdad. Todo limpio, el Personal súper atento siempre dispuestos a ayudar una amabilidad increíble. Gracias a Rasmini también que nos atendió muy bien y nos dio buenos datos. Además en un cierto rango de distancia te llevan y traen de algún lugar de Ubud que estés y es gratis. Va por el hotel. Lo otro podías comprar el desayuno y de verdad eran variados y buenos. También funcionaba súper bien el aire acondicionado que se necesita montón. Y lo otro, en el mapa cuando buscas alojamiento aparece que Sapodilla está como en el límite del centro y la verdad es que es lo mejor porque en esa calle tienes de todo restaurantes bares todo y además estás lejos de la locura de movimiento que hay cerca del templo Ubud. Lo recomiendo totalmente. Para dormir maravilloso.

Nada

Tranquilo y limpio

Es digno de destacar lo bien que te hacen sentir desde el primer momento. Excelente trato de todo el personal. Habitación amplia, limpia y con todo lujo de detalles. Desayuno de 10. Y detalles durante toda la estancia que nos ha hecho decantarnos como el mejor hotel de nuestro viaje, de los 10 alojamientos en los que hemos estado.

Todo, personal, la ubicación, la limpieza, no hay nada que cambiar

Ubicación tranquila pero céntrica. El personal, excepcional, trato cercano y pendientes de todo (hasta se aprendieron nuestros nombres).

Para el nivel de precios indonesio, no es barato.

Recomiendo absolutamente este hotel. No es un hotel de lujo, es un hotel con encanto. Su mayor riqueza, la atención del personal: en la recepción, Eka, Diane, Indri y demás muchachas; entre los choferes, Wardika, Ramadí y los demás; todos los que arreglan los cuartos o traen el desayuno al cuarto. Todo orquestado por Juli, la magnífica "directora de esta orquesta". No sólo cumplieron con sus tareas, sino que tuvieron un montón de gestos extras de ayuda y cuidado. Las habitaciones son amplias y cómodas, con preciosa vista al jardín. Los colchones, excelentes para un sueño reparador. el servicio de transporte al centro, genial, facilita mucho la moviidad. Recomiendo hacer la clase de cocina con Wayan, el jefe de cocina. Fue muy divertido y sabroso. estuve 17 días allí y fue mi hogar. nos despedimos como grandes amigos.

Todo fue perfecto.

Su situación, la amabilidad del personal, limpieza.

Nada

Un oasis de paz en medio del caos del tráfico de Ubud. Te metes por un pequeño callejón a través de una de las calles principales y apareces en un lugar de paz y sosiego. Nada más llegar te reciben con un "Bienvenido a casa" y te hacen sentir tal cual, como si estuvieras en casa, pero sin tener que ocuparte de nada más que de disfrutar. La atención del personal es excepcional, siempre sonrientes, siempre saludando por tu nombre tanto al salir, como al entrar. Un día necesitamos ir a un dentista y nos ayudaron a encontrar uno y a pedir cita, preocupándose después por nuestro estado como si fueran de la familia. La habitación estaba super limpia, es espaciosa y comodísima. La zona de la piscina es preciosa y está impoluta, tal y como se ve en las fotos. Todos los días reponen en la habitación 6 botellas de agua gratis, lo cual es muy de agradecer. El desayuno es a la carta, y se elige por la mañana en el restaurante de al lado, pero si quieres, avisando el día anterior, te lo llevan a la habitación, lo cual es un gustazo. Además tiene bastantes opciones y está muy rico todo (probamos muchos platos distintos porque nos quedamos 6 noches). La ubicación es genial, a 5 minutos andando del bullicio. A menos de 10 minutos andando hay infinidad de restaurantes con mil y una opciones de comida, desde tradicional indonesia, a japonesa, occidental... una maravilla sin tener que coger moto o coche. Los principales puntos de interés de Ubud (Monkey forest, palacio, etc) también están cerca paseando. Si alguna vez volvemos a Bali, desde luego será muy difícil elegir otro alojamiento.

Nada en absoluto. Todo fue perfecto.

Todo estaba ideal, las habitaciones muy espaciosas y limpias, el desayuno bastante variado, la atención de Rasmini y el resto del equipo muy profesional y detallista, la piscina es un lujo y muy bien cuidada, la recepción es muy acogedora con la hora del té o café,el servicio gratuito de transporte al centro de Ubud es muy conveniente .Sin duda,un sitio perfecto y tranquilo para alojarse en Ubud

La habitación muy cómoda y con todo lo que puedas necesitar. La piscina genial, y lo mejor el personal, que no puede ser más atento.

El hotel es pequeño pero es muy bonito en su parte exterior con la piscina integrada en el conjunto del hotel. El personal que trabaja en el hotel es muy amable y dispuestos siempre a ayudarte y hacerte la estancia muy agradable. La habitación es amplia y limpia. El desayuno es bastante completo

La atención del personal y la piscina