Opiniones del B&B Domus San Pietro

Mi habitación estaba en una segunda planta con una escalera muy empinada . Debería estar anunciado para evitar sorpresas

El lugar parece nuevo, muy limpio, dentro de todo es tranquilo, cerca a la estación del ferry y el bus, la terraza es cómoda y puedes quedarte a admirar la noche, en si Cetara es una excelente opción para quedarte si tu idea de viaje es descansar y conocer. Es importante tener en cuenta que al ser un terreno inclinado vas a tener muchas escaleras, por lo tanto, al menos en este alojamiento te encontrarás con unas escaleras en vertical qué para una persona con discapacidad o dificultades para caminar no van a ser sencillas, si eso no te importa, el alojamiento en sí, es perfecto.

Que el check-in sea limitado hasta las 6, pero Fabrizio fue flexible, ya que perdimos un tren y comprendió nuestra demora.

No sé si es que no había prestado atención a las fotos, pero nos encontramos con una terraza inmensa que hacía el espacio súper apetecible. El baño inmenso como una habitación más. Todo súper moderno y limpio. Muy cómodo. Recomiendo muchísimo.

Me encanto

La escalera

Las escaleras de entrada

El b&b es acogedor y no hay ruido por la noche.

Las escaleras de acceso son como el Himalaya, aunque es comprensible por lo escarpado de la costa.

Muy buena ubicación, habitación cómoda con una terraza formidable

Acceso complicado, parking alejado

Ubicación y una terraza bastante amplia

Hubo una confusión al concertar la recogida hacia el aparcamiento y las escaleras de entrada son realmente empinadas

Departamento todo nuevo y cerca de todo .

No tiene vista al mar como dijeron

La propiedad es maravillosa. Tiene una terraza única donde pasábamos los atardeceres y amaneceres mirando el mar, las montañas y las calles. Las aberturas son de primera calidad, todo funciona de maravillas. Queda cerca de la playa y de la calle principal. Sin dudas volvería a ir a este lugar.

Si bien es normal encontrar este tipo de construcciones en la costa Amalfitana, la escalera de entrada al departamento es todo un capítulo aparte. No por la cantidad de escalones, sino por lo empinada. Es de temer. Le tuvimos muchísimo respeto. No es apta para gente mayor, niños pequeños, ni personas con movilidades especiales. Con valijas se pone aun más peligrosa y difícil de subir y de bajar. Además, la puerta de entrada está sobre la ruta por donde pasan todos los autos y colectivos. Cuando salís hay que pegar el cuerpo a la pared hasta llegar a las escaleras que van al pueblo. Pero siendo jóvenes vale cada pena.