Opiniones del Suba Beach Nipa Huts

Desde luego una “local experience”.

Después del camino complicado para poder llegar, encuentras una especie de “semi poblado” precario que, aunque es al lado del mar, está alejado del puerto y de todo y no es una playa apta para el baño, ya que está sucia y huele mal. Al llegar al establecimiento, no nos parecía ni que la “recepción” pudiera ser un sitio para alojarse (ver la foto). Las cabañas olían muy mal. Seguramente fuera la mezcla entre la humedad, el salitre y lo precario del sitio, pero la percepción de los cuatro del grupo fue un olor algo parecido a orín. Las camas son simples espumas con sábanas viejísimas. En cuanto a los baños compartidos, ya lo sabíamos por la info que aparece cuando reservas, así que sobre esto no puedo opinar. Mama Rose (la propietaria) tiene tanta calle que te va cambiando los precios de su “servicio de transfer” a su antojo, eso sí, con una media sonrisa aséptica que no sabes muy bien cómo interpretar. Tienen “servicio despertador” de un gallo trasnochador que, por lo menos, nos hizo reírnos bastante con la situación en general. Desde luego las fotos que aparecen no reflejan en absoluto la realidad del sitio, ya que lo hacen parecer todo muy superior a lo que uno se encuentra al llegar. Nosotros reservamos allí porque lo mencionaba un blog de viajeros y Maya es una lanzadera a Malapascua con poquísimas opciones, pero desde luego vale la pena pagar más y no alojarse aquí. En definitiva, no lo considero apto para poder considerarse un alojamiento, ni por el sitio, ni por las instalaciones y ni por las condiciones.

El trato de la señora que vive allí.

Nada. Todo fue fantástico. Quizás diría que cuesta un poco de llegar siguiendo las indicaciones del Maps. Así que mejor hacer caso al mensaje de la mujer cuando estás a punto de llegar.

El precio. Un sitio en el que llegar a dormir e irte al día siguiente pronto para Malapascua. Como estábamos solos, el baño compartido era solo para nosotros!

La llegada al alojamiento es complicada, aunque es cierto que te ofrecen recogerte. Nosotros no lo cogimos porque pensábamos que la van privada nos podría llevar hasta la puerta pero no! El camino es complicado estrecho y por playa en el trecho final. Coged que os vayan a recoger! Lo hacen amablemente y gratis.

La ubicacion es espectacular. Estaba muy limpio. Muy economico. Servicio muy atento

Muy buena ubicacion frente al mar

Llegamos a la hora prevista que habiamos indicado y no habia nadie para recibirnos, tambien avisamos con tiempo para que nos pudieran recoger y ninguna respuesta, tuvimos que al final ir andando para encontrar el hotel completamente vacio. Tuvimos que esperar mas de una hora a que llegase una persona, la cual estaba completamente perdida hasta que llego mas tarde la dueña… al final no hubo tampoco cena y contabamos con ella con los comentarios tan buenos. La ducha bastante reventada para ducharse… la verdad que acabamos bastante decepcionados con las espectativas que teniamos

Los dueños son una pareja mayor muy amable. En frente de la playa. Para pasar una noche antes del bangka a Malapascua está bien.

No hay agua caliente, limpieza mejorable. A las afueras del pueblo. Eché de menos mesa o silla donde colocar la mochila, que no fuese el suelo.

Nanay Rose fue excepcional. Estuvo súper pendiente de nuestra llegada y contestó todos nuestros mensajes y dudas. Además cuando llegamos nos ofreció cenar, nos dio el desayuno al día siguiente y nos ayudó a llegar a Puerto Maya. Completamente un acierto

Lo cómodo que fue para poder ir a Malapascua al día siguiente

Los baños compartidos

El trato del matrimonio que lo regenta es espectacular. Más que serviciales. La ubicación estupenda para relajarse y fuera de tantos lujos un sitio estupendo.

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Una buena opción para pasar la noche para llegar a Malapascua a precio razonable cerca del puerto (20 minutos) con parada de bus de Cebu a Maya Port (10 minutos) Desayuno incluido y el señor te recoge en su trimotor si llegas muy tarde y de noche para no ir sola.

La musica de los vecinos a la mañana siguiente a las 7 am, pero ayudó a llegar a Malapascua temprano y las luces de las duchas tal vez se podrían cambiar.

La amabilidad de su propietaria. Esta a pie de playa

La dueña es amable y servicial. Aunque no habla mucho inglés, se comunica correctamente. La dueña y la vista al mar elevan la puntuación del hospedaje sin duda. Los baños estaban limpios.

El hospedaje no es nada lo que esperaba, la entrada desde la carretera principal es un largo camino de piedras destruido, donde hay animales y desorden. Además, la entrada es por la playa teniendo que caminar unos cuantos metros con las maletas por la arena, lo cual fue complicado. Los bungalós solo tienen un ventilador pero funciona bien. Se escucha absolutamente todo entre las cabañas, incluidos los animales de noche que si sos de sueño ligero puede molestarte. Te cobran todo! El wifi, el agua potable, el parking… Ademas, por la noche el hospedaje se quedó sin electricidad por lo que se apagó el ventilador y no hubo agua en el dispenser. La ducha solo tiene la opción de agua fría. La cama es un colchón fino aún que dormimos cómodos, y la almohada es dura. El barrio no parece muy seguro si eres extranjero. La zona solo trabaja con cash, nadie recibe tarjeta.

Estaba a pie de playa, tenía desayuno básico incluido

Estaba alejado de todo, y completamente aislado, solo se puede salir con tuktuk. La cama no era cómoda, los baños estaban llenos de arañas, el ventilador era minúsculo y a penas daba aire

El trato de Nanay Rosa fue impecable. Mi pareja se enfermó y tuvimos que extender una noche más y ella estuvo pendiente continuamente por si necesitábamos algo, nos cocinó comida que él pudiera comer. Es un sitio muy tranquilo, limpio y en primera fila del mar.

Sinceramente no hay nada malo que podamos decir, simplemente que la playa no es de las mejores con respecto a la limpieza. Pero con respecto al establecimiento todo bien

Muy majos y muy limpio, todo perfecto!!